Arráncate la cara

De nuevo en el sótano, lo único que pienso es en arrancarme la piel a tiras.
De un tiempo a ésta parte sólo siento el escozor de el último arañazo felino en mis vísceras.

Y no entiendo ese vaivén por su parte, ni esa fijación por la mía.
Que de mi sangre ellas siempre hacen abono.



Como prometí no llorar, me abrí a punta de navaja cada comisura hasta las orejas de par en par.
Nadie verá jamás el monstruo que me muerde desde dentro, ya no más.
Sonreiré hasta desfallecer, y reventaré contra el suelo con cara del más intenso placer. Y un charco negro engullirá todo mi cuerpo para iniciar la metamorfosis.


Yo no escribo poesía, sólo escupo jeroglíficos de lágrima ácida, humeando sobre trozos de mi piel.
No quiero métrica, no quiero musicalidad, no quiero más que imágenes oníricas de lo que sobrevuela por encima del caldero.

Arráncate la cara en silencio, mientras pareces inmune a todas las tormentas que invocan las sirenas. Sólo ellas, tan ajenas a todo, lloran lágrimas de plástico fundido sobre la piel del toro que no sufre, que se limita a embestir perdiendo el juicio por intentar mantener el control. Guardando sus corazón en una caja barnizada de color y rellena de espinas.
Recordando que gritar no alivia el dolor. Subiendo a una piedra y pedirle al cosmos pasar a ser parte de él.

Yo no pedí ser humano, ni morir. Sólo pedí existir.
Me voy por las ramas para no odiar a aquellas que me da por amar.

Veo puñales afilados volando y Prometeo no se adapta ni un ápice a sufrir. Es duro como un inmortal suplica su propia muerte.

Y ya no hay camino. Ni oscuro ni iluminado. Solo un precipicio cuyo final no se vislumbra.
No sé qué paso dar, cuando sueñas con ser un demonio y despiertas sin tener alas.

Y les da igual, otro perro ladrará. Otro DJ sacará su aguja y pinchará su vinilo. Otro trovador tocará la lira bajo su balcón mientras otro caballero se la tira antes de un bajón.
La historia de la salamanquesa a la que la oscuridad transmutó finalmente en dragón. Cuando la furia pide sangre de vírgenes, siempre aparece un caballero dispuesto a abrirte en canal.
Pero a ella le da igual, sobre las rosas que florecen de tus resto se lo montarán.


Lo he sido todo.
Renacuajo, ratón, lobo, león, humano, sombra, luz y dragón. Y siempre muere el mismo.
Ya sólo quiero ser etéreo.
Ya sólo quiero ser un monstruo del que nadie se pueda librar.
Quiero ser la pesadilla que, en el despertar oprime tus órganos con sus heladas garras.
Quiero ser el violador que te captura en tus sueños.
Quiero ser la sombra que te inquieta cuando se va la luz.
Quiero ser el frío.
Quiero apuñalarte de placer.
Quiero ser la voz que ni las pastillas logran hacer callar.
Quiero ser la obsesión, no el obseso.

Quiero estar presente, no quiero que me olvides.
Quiero ser tu enfermedad.
Quiero incrustarme en ti y dejarte sangrando cuando quieras arrancarte de mi.
Quiero ser el oscuro veneno que sustituya a tu sangre.
Quiero que sufras lo que me has hecho sufrir.
Porque te quiero. Pero no quiero.


Y por vuestra culpa, queridas. Sólo por vuestra culpa.
Tantas han sufrido.
Y por vuestra culpa, sirenitas. Sólo por vuestra culpa.
Tantísimo van a llorar las siguientes.

Porque ya no me queda alma, porque ya no me late el corazón, porque por dentro sólo me queda negror y porque pedís a gritos que mis caricias sean peores que un alud.
Ya no queda nada de mi.

La culpa fue de la bondad. La misma que escupís a la cara de todo el que no os trata lo suficientemente mal.






(Echo sin emociones. No basado en experiencias reales. Para que los frustrados se revuelquen en su odio. Por vosotros, blancos soldados corrompidos tras tantas dentelladas de sirena y convertidos en alimañas maliciosas y risueñas. Porque todos hemos estado ahí.)

Cabezazo

Aporrear el teclado.
¿Porqué mierda he de comprenderte yo, porqué coño no me entiendes tú?

Porque es duro escupir el alma cuando intentas no hacerlo. Es como ese vómito que reprimes tras levantarte en año nuevo, de ese que no puedes huir.

Y te te gritaría hasta quedarme afónico, y lloraría por la catarsis.
Y no sé qué te diría, supongo que depende de ese momento.

El caso es que no soy nadie del resto. Ni él, ni ella, ni aquel, ni aquella, ni éste, ni el otro. Soy yo.
Yo soy muchos. Pero ninguno de los otros soy yo.

Por los mierda que te engañaron y te creíste, ahora tomas por mentiras todas y cada una de mis confesiones. Aquellas que me cuesta tantas heridas confesar.
Lo peor es que no me voy a arrodillar, ni me apetece jugar.

Cuando estoy contento, puedo pasarme la vida pasándote de nuevo la pelota.
Pero ahora no, ahora sólo quiero que te sientes a mi lado y me digas de una vez las verdades.

No voy a repetir de nuevo, no voy navegar en la tormenta nunca más si no estás tú en el campo de batalla.

No me basta con cal y arena, apuesta todo en una ronda.

Antes me enamoraba para mi mismo, después me desnudaba agarrándome a los cuentos, más tarde dejé de enamorarme y enamoré.
Pero ahora me enamoro mientras me estrangulo las arterias para poder respirar a gusto.
Y no te diré un "te quiero" hasta que no lo lea en tus ojos, hasta que no me lo griten las silenciosas huellas de tus dientes en tus labios,
Aunque muera esperando, no verás una gota de lágrimas ni sangre recorriendo mi piel. Aunque si me pinchases estallase.

Negror

No duermo.
Yo soy la oscuridad que os envuelve a todos mientras soñáis.
Soy el que diseña vuestros sueños, el guionista de vuestras fantasías.
Soy el frío que os hace arroparos más y el cálido aliento espontaneo al que os volvéis adictos en plena noche de invierno.
Soy la sombra que os observa desde la silla, así como la voz mental que os tranquiliza haciéndoos creer que es sólo ropa.
Soy el ruido en la lejanía, los gritos de disputa en el portal, las sirena de policía, la ansiedad de ser mortal.
O quizás el violento viento en el bosque, los gritos de lo silvestre, lo oculto. Soy los ojos de gato que se clavan en los tuyos tras el cristal.
Y soy la seguridad de cuatro paredes a la casi penumbra, así como el susurro bajo el somier.
Soy la sutileza del pijama o la sábana que acaricia vuestra piel.
Soy la brisa que, furtiva, entra por la ventana en invierno y os abraza para mezclar mi frío con vuestro calor en vacaciones de verano.

Soy el suelo convertido en hielo y la profundidad del pasillo.


Soy cada raíz textil, sedándoos y dando la bienvenida al reino onírico.
Soy la energía vampírica que fluye por la tela de araña del colchón.

Soy las metas, el sueño húmedo, la pesadilla.
El cielo, el suelo, el agua, la arboleda y el templo.
Y soy la condensación de todo lo anterior.

Soy el último beso antes del despertador, bañado en la amargura de la consciencia, que os recuerda que nada de lo vivido ha penetrado en la realidad.

Soy millones de ojos estallando al encenderse la luz.

¿Porqué ellas putas y ellos campeones?

Bueno, es sencillo (y confirmado por científicos):
Somos muy liberales, muy guays y exaltamos el sexo de una forma muy bipolar.
Nos encanta, es genial. Un placer tan divino, un mar de posibilidades....

Pero limitándonos al sentido estrictamente biológico del sexo, es un medio por el cual reproducirnos. Únicamente.
La gran mayoría de nosotros busca sexo para tener placer, usando métodos anticonceptivos.

Pues os voy a contar un secreto que podéis corroborar consultando internet: vuestros instintos, entre los que se encuentra el sexual, nace de una parte primitiva de vuestro cerebro que no tiene ni idea que el sexo es algo para tener placer. Simplemente lo ve como el método por el que reproducirse, ampliar la especie. Y éste posee sus propias reglas.

Dominamos como "evolución" o "selección natural" ¿verdad?
Vale, partamos de esos conceptos.

Tenemos al macho por un lado, la hembra por otro.
Juntos podemos dar lugar a nuevos individuos por medio del sexo.

Pues bien:
Nuestro cerebro instintivo sabe muy bien qué consecuencias tiene el sexo para ambos géneros. Y qué papel tiene cada uno en la evolución.

El papel del hombre respecto al apareamiento es el de competidor, pretendiente, como queráis llamarlo.
El papel de la mujer es el de juzgar si a quien se va a pasar por las piernas dará lugar a una descendencia adecuada para el futuro de la especie. Si tiene características que procurará la mejor descendencia (o al menos una que pueda sobrevivir).

En cuestiones de apareamiento, (y ésto que voy a decir suena fuerte, pero es la verdad) la función del hombre es esparcir su semilla, su genética, sus soldaditos.... con todas las mujeres fértiles con las que LOGRE aparearse.
El papel de la mujer, la hembra, es otro diferente pero que encaja perfectamente con la función del anterior: el de permitir o no que éste tenga sexo con ella, comprobando si sus características son favorables a una prole sana y "de buena calidad" (no os preocupéis, chicas, de ésto también se ocupa el inconsciente. Cuando un chico os gusta es que tiene algunas de esas características).

¿Porqué el hombre necesita simplemente esparcir la semilla y la mujer tiene que ir con tanto cuidado? ¡si es sólo sexo!
Pues bien. Aquí entra en juego todo lo que cada uno arriesga.

¿Qué arriesga el macho?
Poca cosa.... solo tiene que fecundar, ya está.
Tiene que esparcirlo en cuantas más hembras mejor, para asegurar una gran cantidad de prole por su parte. Y ya está.
Basta con la hembra sea fértil y sana.
La mujer, por su parte, invierte mucho más.... al quedarse embarazada se vuelve débil, tiene cambio hormonales, una gran dificultad de movimiento, el doble de gasto de energía, mayor necesidad de alimentación y reposo, molestias, etcéra.... y ésto 9 meses. Sumado al cuidado temporal de las futuras crías.
Es invertir mucho para que luego resulte que los hijos nazcan "defectuosos" (perdónenme el calificativo, pero ya sabemos que mamá naturaleza es totalmente Nazi) y se mueren en seguida.
O peor: que haya dado con un macho que se da a la fuga tras la cópula. Quedándose ella casi indefensa ante las inclemencias de la naturaleza o el acecho de depredadores.
Porque sí, sois muy independientes y toda la pesca. Pero es deber biológico del hombre cuidar de la hembra que ha preñado durante el embarazo (además, le conviene que no se muera para que nazca SU prole)

Cabe decir que nuestros instintos no tienen ni idea que estamos en pleno siglo XXI, ni que hay aviones, ni coches, ni nada.
Él cree que somos primates en plena sabana haciendo lo que hacen los primates salvajes ¡SOBREVIVIR!

Aunque nos sorprenda y nos miremos unos a otros diciendo "no puede ser", la misión principal del sexo es reproducirnos y el placer es "el premio" por lograr hacerlo.

"Pero tronco, no nos des la brasa con ésta mierda. Nos ponemos condón o algo y ya está"
No, amigo.... el cerebro primitivo de donde nacen estos deseos pecaminosos no tiene ni idea de qué es un anticonceptivo. Él asocia el follar a embarazarse. Punto.


Poligamia.... somos polígamos por defecto.
Esto quiere decir que podemos acostarnos todos y todas con cuantas personas nos plazca. De eso se trata, en verdad. De lograr la mayor cantidad de mezclas genéticas posibles.

Pero está la malvada sociedad, montón de basura fétida que pretende ser una simulación de la naturaleza y lo que es en verdad sólo un conjunto malas interpretaciones de ésta y dogmas que interesan a las élites.....
Llega la monogamia y con ella la "fidelidad".
Nuestro inconsciente dicta "Una mujer puede acostarse con quien quiera, siendo selectiva"
Y eso se tergiversará en la ignorante masa como "Que no se acueste con muchos, pues es una puta"


En definitiva: no hay mujeres putas, puesto que todas lleváis el "chip" instalado de ser selectivas.... así que no preocuparse y acostaros con todo hombre que os apetezca. Pues vuestra mente os está pidiendo tener hijitos suyos y, aunque haya condón, ella cree que os vais a quedar embarazadas.
De ésta forma la engañáis a ella y disfrutáis de la sexualidad contemporania sin sorpresas lloronas. Mojáis sin mojaros.


Así que, básicamente por eso, se os llama "fáciles" o "putas".... por una malísima interpretación por parte de la humanidad actual de lo que es la realidad biológica. Como el racismo, el machismo, las jerarquías, el asco... y, en general, todo.
"Eso es como todo"

¿Porqué el hombre es un campeón si folla mucho?
Básicamente, porque consigue el objetivo biológico de "fecundar" (según el inconsciente) a una gran cantidad de óvulos. Eso significa que ha logrado que una gran cantidad de piernas se le abran, que a su vez significa que tiene una serie de características que lo convierten en un "buen ejemplar" de homo sapiens.

¿Comprendemos ahora el significado de esas frase tan ilustrativa de las cerraduras de calidad y las llaves maestras?
El merito del hombre de "ser un campeón" no es por tener relaciones con muchas, sino por LOGRAR que ellas le hayan permitido tener sexo con ellas individualmente, ya que lo han reconocido como ejemplar cuya genética es apta para pasar a la siguiente generación.
De nuevo insisto en que ésto es subconsciente.

Podría explayarme más sobre ello, pero nos limitamos al "¿Porqué ellas putas y ellos campeones en temas de promiscuidad?".
Pues bien, por lo explico en ésta bíblia.
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Dicho ésto, he de decir que yo estoy a favor de la libertad de gozo sexual, de la promiscuidad, la poligamia, el instinto y el imperio del placer.

Simplemente me limito a explicar las bases sobre las que se erige nuestro psiquismo sexual.
Porque se quiere crear un mundo maravilloso en el que todo es bonito, polimorfo y relativo. Pero solemos olvidar QUÉ somos, CÓMO somos y PORQUÉ lo somos.